Luna llena

Ni el licántropo más peripuesto ni el animal más brutalmente seducido por la luna llena hubiese podido sobrevivir a la que hubo el otro día 18.
Gracias a lo que sea sobreviví a la tentación de engullir una serie de pastillas en concreto dieciseis cuya ingesta me hubiese producido una sobredosis desencadenante de un coma. A no ser que los supuestos efectos secundarios ´del fármaco en cuestión, vómitos, hubiesen hecho que mejorara.(Hay que tener en cuenta que estando grogui y bocarriba lo primero que te puede pasar es que te ahogues con tu vómito)
Sé que actos como este son puramente egoístas porque no puedo chapar algo que no he decidido. Quiero decir, no soy dueño de algo que se me ha dado sin yo desearlo.
Por primera vez, y creo que única, le debo dar las gracias a los putos exámenes. Como estaba memorizando un examen que tenía el 19 a las 10 de la mañana, no sé de qué modo,la decisión de que tenía que presentarme e intentar aprobarlo y consecuentemente de que debía seguir estudiando esa noche, me produjo un beneficio más que considerable.
Gracias a todo aquello en lo que creo por no haber dado un susto a todos los que quiero.